El Banco Central y el Ministerio de Economía están desarrollando resoluciones para facilitar el uso de estos fondos en la adquisición de bienes durables e inmuebles, sin restricciones. La introducción de estos dólares en el circuito económico podría potenciar el crecimiento, que actualmente se encuentra en un 6% anual. Además, permitiría satisfacer la creciente demanda de dinero sin emitir más pesos, alineándose con la estrategia del Gobierno de controlar la inflación.
El Gobierno considera que esta iniciativa, en línea con la promesa de devolver a los ciudadanos la libertad de usar su dinero, podría reducir las presiones inflacionarias y estimular la inversión privada. Los primeros indicios apuntan a una posible desaceleración de la inflación en abril, con un índice inferior al 3%. Sin embargo, las autoridades también planean implementar medidas para prevenir el uso indebido del sistema en el blanqueo de capitales y el financiamiento del terrorismo.