Galván se destacó por su sólida defensa en el Mundial de 1978, formando una dupla impenetrable con Daniel Passarella. Junto al arquero Ubaldo «Pato» Fillol y los laterales Jorge Holguín y Alberto Tarantini, construyeron una defensa que fue clave en el éxito argentino. Su participación en el Mundial de España 1982 y 34 apariciones con la camiseta albiceleste reafirmaron su lugar en la historia del fútbol.
Luis Galván inició su carrera profesional en Talleres de Córdoba en 1970 y permaneció allí hasta 1982. Luego, su trayectoria lo llevó a clubes como Loma Negra, Belgrano de Córdoba, Central Norte de Salta y Bolívar de Bolivia. Finalmente, regresó a Talleres, donde se retiró en 1987 a los 39 años. Su legado como defensor y su impacto en el fútbol argentino serán siempre recordados.