El acto fue tan frío como el clima en la mañana de "festejo", tal vez los ánimos por lo menos en lo que se debía mostrar no estaban para celebraciones, luego de la escandalosa derrota del oficialismo local el pasado domingo.
Igualmente se dieron cita distintos establecimientos escolares y fuerzas de seguridad, fue muy notoria la ausencia de autoridades provinciales que claramente decidieron hacerle el vacío a Ripoll, a manera de factura por lo que aconteció en las elecciones, con esto queda demostrado el momento político muy delicado, si recordamos anteriores festejos donde gran parte del arco político provincial se hizo presente para estar en el día más importante del año para la ciudad, pues esta vez no.
A la hora de hablar, siempre escaso y limitado en su discurso Ripoll, habló de "esfuerzo y unidad en comunidad, no dejando que vengan a dividirnos supuestos salvadores", en clara alusión a sus muchos adversarios políticos.
En otro tramo alcanzó a memorizar algo del preámbulo de la Constitución Nacional e invocó a "Dios fuente de toda razón y justicia que nos permitirá estar en el lugar que tanto deseamos, cada uno con su idea", en esa parte del discurso todo se tornó confuso.
Para terminar reconoció a antiguos pobladores y a los que ya no están, destacando lo hecho por el municipio. Sin dudas a Ripoll Hijo le hicieron saber la disconformidad por todo lo que no hizo el domingo en las elecciones, por parte de las altas esferas, donde con insistencia se rumorea que no trabajó para la renovación y con su gobierno no hizo más que agravar el resultado.
Ahora deberá ver y estudiar sus próximos pasos, con un concejo en contra, con los arriba muy enojados y con nula capacidad de reacción política, acorralado...