investigación se inició días atrás, cuando un vecino denunció consumos en línea que no había autorizado. Las sospechas recayeron rápidamente en la empleada doméstica, quien habría fotografiado la tarjeta de crédito de sus empleadores y utilizado esos datos para efectuar gastos a través de servicios de delivery y compras en línea.
Con orden judicial, agentes de la Dirección Cibercrimen de la Policía de Misiones allanaron el domicilio de la mujer, ubicado en el barrio San Onofre. Allí incautaron elementos adquiridos fraudulentamente y la sospechosa quedó demorada.
Durante el análisis técnico de los dispositivos secuestrados, los investigadores encontraron archivos y capturas de pantalla con material de abuso sexual infantil, que pertenecían al teléfono de la pareja de la acusada. Ante estos hallazgos, el Juzgado de Instrucción N.º 7 ordenó un segundo allanamiento en el mismo lugar, realizado ayer miércoles 4 de junio con la presencia del fiscal especializado en Ciberdelitos, Juan Pablo Espeche.
En esa segunda diligencia, se secuestraron nuevos dispositivos electrónicos, como teléfonos celulares y pendrives, y se procedió a la detención del hombre, quien quedó a disposición de la Justicia.
La causa sigue en plena etapa investigativa, ya que no se descarta que la mujer también haya tenido algún grado de participación en el almacenamiento o distribución del material ilegal. Asimismo, se investiga si la estafa con tarjetas de crédito se habría repetido en otros domicilios donde la acusada trabajaba.