Romero, en tanto, quedó completamente relegado con la llegada de Agustín Marchesín, que llegó para adueñarse del arco. Las lesiones y el escándalo en el partido frente a River marcaron el final de su etapa. Fernando Gago le había dado minutos en encuentros frente a Tigre y Huracán, pero desde entonces no volvió a tener protagonismo.
Otros jugadores que también aparecen en la lista de negociables son Cristian Lema, que despierta interés en Belgrano, Esteban Rolón, actualmente marginado del plantel, y Frank Fabra, que a pesar de algunos intentos de recuperación, ya lleva varios años en el club y su salida parece inevitable. Lema no juega desde su lesión sufrida en octubre de 2024, Rolón no sumó minutos tras volver de su préstamo, y Fabra, pese a su trayectoria, ya no tiene lugar en la consideración del cuerpo técnico.
Además, hay casos condicionados por posibles incorporaciones. Si llega un nuevo delantero, Lucas Janson dejaría el plantel. Lo mismo sucede con Agustín Martegani, quien alterna entre funciones de interno y volante por banda: si Russo incorpora a alguien en ese puesto, el mediocampista también saldría. En cambio, la casi confirmada salida de Advíncula dejaría en el plantel a Juan Barinaga, a menos que el club fiche a otro lateral derecho.
Con la limpieza del vestuario en marcha, Boca busca renovar su plantel y comenzar una nueva etapa bajo la conducción de Russo, con la mira puesta en consolidar un equipo competitivo de cara al exigente calendario que se avecina.